Esta semana comienza mi último año en el tercer piso. Sí, en un año tendré 40. Lo que parecería un camino hacia volverme vieja ha sido un viaje increíble y maravilloso para mí. Todas las edades son importantes y todas tienes cosas muy buenas en muchos aspectos, pero para mí, esta década de mis 30 ha sido sin lugar a dudas, la mejor etapa de mi vida hasta el momento (aunque espero que la siguiente década me sorprenda y la supere). Definitivamente ha traído grandes cosas, por eso quiero compartir los aprendizajes de mis 30s.
Estos años han estado llenos de lecciones, certezas y verdades que he ido descubriendo y aprendiendo, con la confianza de permitirme pensar, explorar, analizar y concluir.
Los 30 años te llegan con un poco de madurez y también todavía mucho de juventud. Yo me siento afortunada que empecé este momento de mi vida ya siendo mamá de mis dos hijos, pues siempre había soñado que así fuera. Lo malo fue que no pude celebrar mis 30 con mucha pompa pues acababa de ser mamá por segunda vez.
Pero ese momento oscuro y confuso de trasnochos, ansiedad y miedos, también me llevó a un punto en el que me tocó abrir más los ojos y definir que necesitaba una verdad y una consciencia para mi vida.
Esos primeros años de mis 30 fueron un caos absoluto. Mi cuerpo recuperándose de dos embarazos demasiado seguidos, con dos bebés en la casa y con la decisión tomada que quería permanecer con ellos mientras crecían, lo cual ha sido el mejor regalo que he vivido pero también, con mi personalidad controladora, fue una explosión. Porque lo que menos puedes tener con dos bebés en casa, es el control.
Esos años fueron duros porque además mi mamá fue diagnosticada con cáncer y yo me quedé sola, sin apoyo, llena de miedos. Los primeros años de la maternidad te llevan a enfrentar lo más fuerte de tu ser. Los niños se enfermaron mucho, y yo solo recuerdo tener mucha angustia. Salieron todos mis miedos a flote.
En esos momentos es en los que te das cuenta que necesitas ayuda. Yo me apoyé en el reiki, la bioenergética y un cambio de alimentación en la familia que hizo que los niños dejaran de enfermarse. Todo eso me ayudó mucho y conté con personas muy especiales que me acompañaron en esos momentos.
Luego de ese gran caos que lo veo como una marea revolcada, empezó a calmarse la vida. Mi mamá pasó el cáncer y luego llegó a mi tía, pero con una perspectiva muy diferente. Igual fue duro y doloroso, ella ha sido una de las personas más cercanas que he tenido en la vida.
Pero también llegó un regalo gigante a mi vida, el diplomado de coaching ontológico. Fue una gran cantidad de información que me llegó, me abrió la mente, me enseñó que tenía que mirar hacia adentro, me llenó de consciencia. Con todo el caos que había pasado por mi vida, yo ya no sabía ni quien era yo ni que era lo que yo hacía y creo que empecé a revolcarme y a replantearme mi ocupación, mis prioridades, mi propósito.
Después del diplomado y con los hijos un poco más grandes y aliviados, la marea se calmó un poco más. Ha sido como una revolución mental en la que he revisado muchas de mis creencias, de mis ideas, de la información que traía, para analizarla, ponerla en remojo, mirar puntos de vista y establecer mis propias verdades. Han pasado por mi mente muchos temas como la libertad, la felicidad, la culpa, el juicio, el amor y muchas de sus variables. Ellos llegan, rondan y se quedan, se van, vuelven y me ponen a pensar bastante.
Me he apoyado mucho en la escritura y en la pintura, que han sido dos cosas que me conectan con lo más profundo de mi alma, la dicha que siento al escribir y al pintar me ha mostrado que es algo que necesito hacer siempre, son como meditaciones, me llevan al autoconocimiento y a definir mis verdades.
He logrado ir estableciendo un modelo de vida personalizado, una mezcla entre trabajo, hogar, yo, pareja, hijos, que voy ajustando y me hace sentir tranquila y coherente con lo que quiero y he querido ser. Me he acercado a la espiritualidad, explorando ideas, entendiendo conceptos y sobre todo escuchándome y dejándome llevar por mi intuición.
Me siento muy agradecida con esta década, en la que ahora comienzo el último escalón. Si tuviera que definir las cosas importantes y valiosas que me dejó y que aprendí en este momento de mi vida podría decir algunas:
La importancia de las amigas:
En estos años me conecté como nunca antes con mis amigas. Entendí la inmensa fuerza de la conexión femenina y la vida me trajo y me dejó a las personas perfectas para poder compartir mis distintos aspectos.
La certeza de lo que soy y lo que no soy:
Mis 30s me dieron la seguridad de afirmar lo que soy y lo que no y hacerlo valer en mi vida. Acepto feliz que soy nerd, que no me gusta trasnochar, que me encanta estar en mi casa, que quiero comer bien, que me gusta leer. He aprendido a decir no a las cosas que no me gustan con la certeza y tranquilidad que estoy siendo buena conmigo misma.
La importancia de mí misma:
Después de abandonarme por los hijos y por el hogar, volví a conectarme conmigo, ahora con más fuerza, descubriendo lo que soy y enamorándome de mi. Entendiendo que lo primero soy yo, que al fin de cuentas yo soy lo único que tengo y tendré en la vida y por eso tengo que ser siempre mi prioridad. Me encanta estar sola, me encanta lo que le logrado conmigo misma. No es egoísmo, es quererse.
La importancia de estar acompañado:
Tengo claro que quiero una vida al lado del compañero que he elegido. Los 30s le han dado solidez a la relación, con independencia y valoración por los sueños y proyectos individuales pero con la certeza de que queremos compartir juntos el camino. He entendido que los hijos estarán de manera temporal y algún día harán su vida (esto todavía me duele), y que tengo cosas que quiero lograr pero me siento feliz de hacerlo al lado de él.
El equipaje que quiero es el de adentro:
He entendido que las cosas materiales son muy ricas pero que eso no define lo que eres, ni tu felicidad. Ya no ambiciono mucho, solo marcadores y pinturas.
Mis grandes lecciones:
He descubierto muchas de las cosas que tengo que aprender en la vida, cosas que no he logrado y creo que es un proceso de toda la vida, un pasito a la vez. Pero me gusta tener el conocimiento y la conciencia de ir sabiendo cuales son. Seguramente cada momento traerá su lección.
Me gusta compartir e inspirar:
Aunque este trabajo en redes, hablando de ti misma suena un poco hedonista, muchos comentarios, mensajes y conversaciones me muestran que las cosas que sé, que me hacen feliz y que me han funcionado, ayudan a otras personas. También mostrarme humana, con mis errores, defectos y momentos duros te conectan con las demás personas. Me gusta mucho conectarme con otras personas.
Yo sí soy querida:
He sido muy tímida, retraída, antisocial. Pero hay situaciones y momentos que me sacan de esa concha y me hacen brillar y yo me sorprendo de mí misma, de lo querida que me vuelvo. Siento que esos momentos son los que mi alma vibra, sucede cuando doy talleres, y cuando hablo de maternidad.
Soy el resultado de lo que hay atrás:
Así a veces no me guste y otras si, soy el resultado de las personas que han hecho de mí lo que soy, de mis papás, de mis abuelos, de mis tíos, de quienes han influido en mí. Tengo que agradecer y honrar a donde pertenezco pero también tengo la autonomía de tomar mis propias elecciones y crearme a mi misma.
El poder de lo que crees:
Cada vez creo más en lo invisible, en la magia, en la intuición, en la energía. Siento que hay algo grande que nos rodea, que nos cubre, que esta adentro y afuera de cada uno. Que tenemos un poder enorme, que somos un todo y que somos una energía de amor infinita. Que nuestro potencial es inmenso y que podemos llegar tan lejos que ni nos imaginamos.
Me siento afortunada de mis aprendizajes de los 30s, espero seguir por un camino tranquilo en el que pueda seguir acumulando experiencias, conocimientos, consciencia y certezas. Espero que el cuarto piso también me sorprenda y me haga más feliz, más ligera de equipaje y más rica en mi interior y ojalá rodeada de gente maravillosa.
ANGELA BETANCUR says
????????????????????????… ME ENCANTA LO QUE ESCRIBES… TAN HUMANA… ❤️
GRACIAS POR COMPARTIR ????????