La maternidad de mi vida se expandió ahora a los gatos. Ya no solo tengo dos hijos, ahora tengo también tres gatos. A mis gatos los baño desde que llegaron a mi casa. Los baño por varias razones. Mucha gente me pregunta cómo lo hago, por eso quiero contarles cómo bañar al gato.
Lo primero es decirles que todos los gatos no se bañan. Mejor dicho, los gatos son animales aseados, se acicalan a ellos mismo todo el tiempo con su lengua. Entonces, en realidad no es necesario bañarlos, es algo muy personal. Para muchos gatos el baño es un trauma horrible y si a uno no le importa y quiere evitarlo pues la verdad no creo que importe.
Algunas personas los bañan una o dos veces al año, otras personas cada 3 meses, otras cada mes, otras una vez por semana. Depende mucho del entorno que rodee el gato, de la familia y de las costumbres.
También depende del pelo del gato. Hay gatos súper peludos que en teoría necesitan más baño que los de poco pelo.
¿Porqué baño a los gatos?
Yo baño a mis gatos más o menos cada mes o mes y medio. Las razones por las que lo hago son:
- No me gusta que la casa huela a gato
- A ellos les gusta (a veces hasta siento que me lo piden)
- Me gusta que huelan rico
Para bañar a los gatos tengo en cuenta varios factores. Uno es que el día esté soleado o al menos que esté haciendo calor, no lo hago por ningún motivo en un día frío. Segundo, que ellos estén tranquilos, o sea, que no haya habido algún evento que les haya generado estrés en los días anteriores. A ellos o a uno. Uno también tiene que estar tranquilo.
Yo a mis gatos los baño desde bebés. He buscado que el momento del baño sea tranquilo para ellos. Desde que llegaron a mi casa busqué que ellos no le cogieran miedo al agua. Para eso aparte de los baños les he generado experiencias positivas con el agua. Por ejemplo les abro un poquito la canilla para que tomen agua, también les pongo una coca grandecita con agua para que tomen y ellos juegan con ella.
He visto que la relación de ellos con el agua es positiva. Por ejemplo cuando alguien se baña y sale de la ducha, los gatos se meten y exploran y miran como quedan goticas cayendo por la pared.
¿Cómo hacer que les guste el baño?
Desde pequeños los acostumbré a bañarlos. Con los dos más chiquitos me tocó bañarlos varias veces recién llegados a la casa porque les dio diarrea y se ensuciaban mucho. Desde que empecé a bañarlos lo hacía con agua tibia para que no fuera una experiencia maluca y además les ponía musiquita relajante para gatos (busqué en Youtube), ademas durante el baño les hablaba bonito y yo estaba tranquila para que no sintieran estrés.
Siempre trato de bañarlos cada mes o mes y medio para que no se les olvide y no le cojan miedo. Y cada vez es una experiencia más positiva.
¿Qué tener en cuenta antes de bañar al gato?
Antes de bañar al gato debes tener en cuenta varias cosas:
- Debe tener las uñas cortadas, para que no corras el riesgo de que se asuste y te arañe.
- Debe ser un día cálido, que haya sol o al menos un ambiente caliente.
- Debes tener shampoo para gatos (yo compro uno de marca burt’s bee) y una toalla para secarlo.
- Debes tener tiempo suficiente y estar tranquil@, ellos sienten el estrés, debes transmitirles que es algo seguro y no les estás haciendo daño.
En qué lugar bañarlo:
Cuando eran muy bebés los bañaba en el lavamanos o en el lavadero de la ropa. Pero ya que están grandes los baño en la ducha, pues hay más espacio y están encerrados entonces no se escapan. No los baño con el agua de la ducha (que cae de arriba) sino con agua en un balde.
Cómo bañar al gato:
Bueno, este es el orden que sigo para bañarlos:
- Primero, preparo todo: Cojo un balde grande y lo lleno con agua tibia. Lo pongo en la ducha. Llevo una coquita para echarle agua y también el shampoo. Tengo lista la toalla afuera a la mano.
- Es importante que tu tengas ropa encima. O sea, no lo bañes en vestido de baño o en ropa interior. Los gatos pueden asustarse y arañarte, entonces es mejor estar cubierta para protegerte. Vas a terminar con la ropa mojada entonces que sea algo que pueda mojarse o ensuciarse.
- Recuerda que anteriormente el gato está con las uñas cortadas, así evitas el riesgo de que te arañe.
- Cuando ya tengo todo en el baño, cojo al gato y me lo llevo con mucho cariño al baño. Yo les he dicho antes que los voy a bañar y que que rico. No se si lo entiendan pero prefiero que lo sospechen para que se preparen psicológicamente y que no sea como una «tortura» por las malas.
- Una vez dentro del espacio de la ducha, cierro la puerta, me agacho y le echo agua encima, le echo dos o tres cocaditas para que quede mojado (trato de que quede mojado todo el cuerpo), luego le aplico el shampoo. Todo el tiempo le hablo y le digo cosas como: que rico el baño, te estas bañando rico, vas a quedar como un príncipe y cosas positivas y bonitas. Hagan de cuenta un bebé. Si creen que estoy loca, se pueden reír, jaja.
- Me aseguro que el shampoo le quede por todo el cuerpo, que haga como espumita por todas partes. Esta parte tiene que ser muy rápido, ellos se mueven mucho y terminas mojándote pero no importa. Tratan de salirse pero la idea es que sea algo tranquilo.
- Cuando todo el gato esta bien enjabonado le echas agua para juagarlo. Si la enjabonada se demora y ves que tiene frio le puedes echar más agua tibia para que no le dé frío.
- No se le debe echar agua en la cara y las orejas. Yo le pongo un poquito pero como con mi mano y reviso que los ojitos también estén limpios alrededor.
- Se juaga todo el gato con el agua tibia yo por lo general me gasto un balde por gato.
- Luego lo escurro, no como un trapo sino que le paso la mano por encima para eliminar el exceso de agua. Y después cojo la toalla sin que el gato se salga y lo envuelvo como un bebé. Esa parte les encanta. Se quedan quietecitos y es la oportunidad para decirles que estuvieron muy bien, que quedaron muy lindos bañados. Yo les doy besitos y los arrullo. Es un momentico de amor para que ellos se tranquilicen.
- Hay gente que usa el secador para secarlos más rápido. Mis gatos se asustan con el ruido del secador entonces no lo uso. Me los llevo para el solecito y ahí se quedan. La idea es que estén tranquilos.
¿Qué debes saber después de bañar al gato?
Después del baño, el gato se va a acicalar. Ellos se organizan su pelito con su lengua un rato largo. El proceso del baño aunque puede ser tranquilo, para ellos no deja de ser estresante. Por eso, casi siempre después del baño harán una siesta larga.
El pelo de lo gatos inmediatamente después del baño, queda medio despeinado. Si lo peinas después del baño va a ser más fácil que el pelo se le seque rápido y además que quede bonito. Después de que se secan quedan con su pelito limpio delicioso de tocar.
Si vas a tomar la decisión de bañar a tu gato es importante que sientas seguridad de hacerlo. No se puede hacer con miedo. Los gatos así como los niños también te miden el aceite. Hay que ser firmes con ellos y a la vez amorosos. O sea: «Te vas a dejar bañar, pero lo haré con cariño».
Si no te sientes seguro o segura para bañar al gato, mejor no lo hagas y busca ayuda en alguien experto. Si decides que no lo vas a bañar sino cada 6 meses o cada año está bien.
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